Delegar: mas que un arte, una necesidad

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Delegar es en el management el confiar y transferir la responsabilidad, no solo en el trabajo sino también en la toma de decisiones, involucrando así a a los demás miembros de la empresa en los resultados.

En otras palabras es el incrementar la capacidad de quienes nos acompañan en las actividades tanto de gestión como operativas.

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Es normal que en el día a día intentando mejorar la productividad muchas veces se realizan tareas de toda índole, en especial operativas, pensando que al hacerlas estamos mejorando la productividad (en el menor de los casos) o que únicamente nosotros podemos hacer esa tarea (la mayoría de las veces).

Tomo y repito los consejos de K. Paauw (couching y productividad organizacional) relacionados con el arte de delegar:

• Seleccione a las personas que entiende sean aptas para el trabajo y entregue la información necesaria y suficiente para que realicen la tarea.
  

• Al delegar un trabajo , también delegar la responsabilidad del mismo y su resultado.
  

• Abrirse al diálogo, establecer límites basados en la responsabilidad y fijar fechas de revisión.
  

• Proveer de los recursos necesarios y de una retroalimentación como guía sin interferir en las actividades delegadas.
  

• Dar todo el respaldo y apoyo cuando sea necesario.
  

• Brindar confianza y reconocimiento cuando el objetivo ha sido cumplido.

El "empowerment" está vinculado con esta acción , es cuando podemos conseguir una autonomía responsable en la otra persona. Conseguir el empowerment en el equipo de trabajo es algo así como que todos los que están trabajando acepten y sean parte activa de la responsabilidad operativa y de gestión de la empresa.

Cuantas veces vemos empresarios haciendo trabajos operativos en las nuevas máquinas que tranquilamente pueden ser delegados a los demás miembros del equipo? Muchas lamentablemente.

La capacitación juega un papel fundamental en el camino al “dejar hacer”. Haciendo participar a los miembros del equipo en esta educación vamos abriendo camino y perfilando a los nuevos guías dentro de la empresa, y no como es una costumbre de que la capacitación es solo entendida por el empresario o el jefe, y traducida según su parecer a la gente que se enfrenta con el problema real diariamente.

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Esta última situación ocurre en todo tipo y tamaño de empresas donde lamentablemente no se analiza el potencial económico que trae el incrementar los contactos y conocimientos a todo el equipo de trabajo, quedando esa información mezquinamente en mano de unos pocos mostrándose así una tipología de conducción de poder en lugar de autoridad conseguida por el conocimiento, la capacidad y experiencia en los trabajos.

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Delegar no es perder, sino ganar, ganar en recursos disponibles para la planificación, para capacitarse, para ver los problemas desde otro punto de vista que nos ayude a tomar una decisión más acertada.

Es por eso que delegar es una necesidad que debe corresponder a una de las habilidades de comunicación o humanas además de las técnicas y conceptuales que debe tener quien dirige una empresa.